Publicada en el BOE la nueva ley de contratos del sector público

Hoy ha sido publicada en el BOE la Ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contratos del Sector Público. Es el momento para el estudio y el análisis de una nueva ley de contratos que trae causa de las las tres nuevas Directivas comunitarias en materia de contratación:

  • Directiva 2014/24/UE, sobre contratación pública;
  • Directiva 2014/23/UE, relativa a la adjudicación de contratos de concesión
  • Directiva 2014/25/UE, relativa a la contratación por entidades que operan en los sectores del agua, la energía, los transportes y los servicios postales

La Ley tiene por objeto la trasposición de las dos primeras mientras que la tercera quedará para una futura ley especial. Dedicaremos esta primera entrada al respecto de la nueva ley, a analizar los que se predican son los tres principios rectores de la reforma. Transparencia La nueva ley de contratos se enmarca en la general estrategia de mejora de la transparencia administrativa, siendo declarados pilares de la nueva ley el respeto a los principios de igualdad de trato, no discriminación, proporcionalidad e integridad. Calidad-Precio Ya desde su exposición de motivos, indica la ley en que es uno de sus mayores Giros Copernicanos en la regulación Contratación Pública, al desplazar el criterio básico de adjudicación de contratos de la conveniencia económica a la mejor relación calidad-precio. La ley no desprecia como regla de referencia la eficiencia económica, pero -al menos de boquilla, veremos luego en lo sustantivo- pone en el frontispicio del sistema de contratación, la mejora de las condiciones en las licitaciones públicas, estableciendo cautelas para que el precio no perjudique los derechos sociales de los trabajadores, o las obligaciones medioambientales, ni en última instancia la calidad de los servicios. Señala, por último, como OBLIGACIÓN la implementación de criterios de adjudicación que permitan la obtención de obras, suministros y servicios "de Gran Calidad", objetivo general que se pretende lograr mediante la inclusión entre los criterios de valoración de aspectos "cualitativos, medioambientales, sociales e innovadores" vinculados al objeto del contrato. Simplificación Un escalón por debajo en la prelación de principios básicos rectores de la reforma se encuentra la Simplificación administrativa, dictándose la ley en un intento de mejora de la claridad de las reglas contractuales y en última instancia de la Seguridad Jurídica. Este principio básico tiene como objeto confeso, mejorar el acceso a la contratación pública de las PYMES.   En futuras entradas analizaremos detalladamente algunas de las novedades más destacadas de la Nueva Ley de Contratos.